Hoy 7 de abril celebramos el día mundial de la salud y se nos ha ocurrido regalaros un consejo para vuestro bienestar incluyendo, claro está, lo que para nosotros es una de nuestras más grandes pasiones, viajar.
Los cambios que viven nuestros cuerpos a lo largo de unas vacaciones desde el momento en que la azafata de vuelo te indica tu asiento hasta que vuelves a sentarte en el sofá de casa al llegar son, en su gran mayoría, un gran beneficio para nuestra salud.
Te preguntarás, ¿por qué te sientes tan bien al viajar?
Aunque la respuesta pueda parecer en un primer momento obvia, detrás de ella hay profesionales en el área de la salud y de seguro un par de matemáticos que la han cuantificado para nosotros simples mortales, por ejemplo…
- Las vacaciones mejoran nuestro estado de ánimo y reducen el estrés
- Ayudan temporalmente a mejorar nuestra creatividad y productividad
- Para los hombres, tomarse unas vacaciones puede reducir considerablemente el riesgo de muerte en un 21% y la mortalidad por enfermedades cardiovasculares en un 32%.
Dejando números aparte, pongamos los puntos sobre las íes…
Uno de los males a nuestro cerebro que pasa por debajo de la mesa es el momento en que nuestra cotidianidad se torna rutina, por eso nuestro cerebro nos agradece con una mejora significativa en sus funciones, aunque nosotros no nos demos cuenta en el momento, ya que al viajar estamos obligados a enfrentarnos a nuevos lugares, nuevos sonidos, sabores, sensaciones, estos estímulos generan diferentes sinapsis -conexiones entre neuronas- así potenciamos nuestra neuroplasticidad y mejoramos nuestra reserva cognitiva.
“Cuando viajas a otro lugar, sobre todo si éste es desconocido para ti, estás obligando a tu cerebro a estar en un continuo proceso de solución de problemas y de superación de desafíos. Viajar requiere, principalmente, aprender y memorizar todo lo extraño hasta que todo resulte normal y conocido. Esto es un desafío para tu cerebro y es como un entrenamiento acelerado”, explica el Dr. José Manuel Moltó, Vocal de la Sociedad Española de Neurología.
Sumado a todo lo anterior, la respuesta más obvia e inmediata que se nos ocurre es que el beneficio más tangible que encontramos al viajar es el desestresarnos, lo que en tu día a día puede parecer un suplicio como organizar tu agenda de la semana, a la hora de viajar se convierte en un paseo elegir cada destino, hoteles, restaurantes, actividades, teniendo claramente
Esperamos que estas razones sean suficientes para hacer el check-in a un vuelo cuanto antes y si aún no tienes muy claro a donde quieres ir, te dejamos un par de ideas para que tengas unas vacaciones de semana santa de película.